Combate el tecnoestrés

El Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo define el tecnoestrés como “el estrés específico derivado de la introducción y uso de nuevas tecnologías en el trabajo, que conlleva efectos psicosociales negativos derivados del uso de las tecnologías de la información y comunicación (TIC)”.

 

Este tipo de estrés, que se ha vuelto más común en la era digital y está relacionado con problemas de salud mental, está provocando un impacto físico, psicológico y conductual negativo que afecta a la productividad laboral y a las relaciones, tanto dentro como fuera del trabajo.

 

Tipos de tecnoestrés

  • Tecnoansiedad. Sus síntomas más comunes son malestar y tensión ante el uso o el pensamiento de uso futuro de las nuevas tecnologías. Las personas que lo padecen pueden llegar incluso a sufrir tecnofobia, un miedo irracional que provoca ansiedad y que les impide hablar de tecnología o pensar en ella. Dentro de este grupo también está la tecnofatiga, relacionada con el cansancio mental o agotamiento cognitivo producido por el uso de las nuevas tecnologías.
  • Tecnoadicción. Se caracteriza por la necesidad de utilizar las nuevas tecnologías en todo momento. La gente que sufre este tipo de tecnoestrés siente que debe estar siempre al día de todo lo que ocurre dentro del móvil u ordenador.

 

Claves para combatir el tecnoestrés

  • APRENDE A DESCONECTAR. Fija límites de tiempo para el uso de dispositivos electrónicos y redes sociales. Establece una hora para dejar todos los instrumentos de trabajo a un lado.
  • REALIZA PAUSAS. Haz pausas regulares durante el día para descansar tus ojos y tu mente.
  • TÉCNICAS DE AUTOCONTROL. Practica actividades de forma regular como relajación, mindfulness o yoga. Esto te ayudará a neutralizar el estrés provocado por el trabajo y te proporcionará un mayor control de los pensamientos y de las emociones.
  • ¿TODO ES URGENTE? Hacerse esta pregunta es vital para identificar tareas. Conviene distinguir lo urgente de lo importante.
  • CONTROLA TUS NOTIFICACIONES. Recibe notificaciones solo de aplicaciones y contactos importantes.
  • ADMINISTRA TU TIEMPO. Utiliza técnicas para ser más eficiente y reducir el estrés. Planifica tu agenda del día, sin sobrecargarla de actividades y gestionando todos los imprevistos que puedan surgir. Si te falta tiempo, selecciona las tareas más importantes según las prioridades. Aprende a decir no.
  • APAGAR EL TELÉFONO DEL TRABAJO. Al terminar la jornada laboral, conviene apagar el teléfono del trabajo. Con esto se conseguirá separar la vida laboral de la personal, y así poder desconectar y empezar con más energía al día siguiente.
  • PRÁCTICA EL AUTOCUIDADO. Dedica tiempo a actividades que no involucren tecnología.
  • DESCONÉCTATE ANTES DE DORMIR. Evita el uso de dispositivos electrónicos al menos una hora antes de acostarte para mejorar la calidad del sueño.